Chanyeol, sabes... apenas podía mantenerme de pie mientras caminaba hacia ti el día de nuestra boda, estaba tan feliz, tan nervioso que mis rodillas temblaban, tanto que sí Luhan no hubiese estado ahí tomado de mi brazo seguramente habría caido, sentía que mi pecho explotaria en el momento en que tomaste mi mano, me sonreiste de manera encantadora y pense que ese seria el primer día del resto de mi vida, por siempre a tu lado... Mientras veo el alivio en tu rostro, y siento como mi cuerpo se desarma al toque del agua fria, en el último segundo de conciencia lo único que puedo pensar es... en lo mucho que me gustaria odiarte.