Magos de Mina: La Piedra de Nami (Libro #1)
  • Reads 79,743
  • Votes 8,018
  • Parts 22
  • Reads 79,743
  • Votes 8,018
  • Parts 22
Complete, First published Apr 16, 2017
Así que, tendría que enfrentar algo que estaba dentro de mí. Tenía en mi poder los cuatro elementos; fuego, agua, tierra y aire. Podía hacer explotar lo que sea, podía utilizar el agua para apagar lo que hice explotar, podía hacer creer plantas en la tierra y podía utilizar los vientos. Podía hacer todo eso. Y extrañamente, sabía cómo hacerlo. Sabía cómo utilizarlos todos, como si hubiera estado aprendiendo como hacerlo desde hace milenios. Si yo era la persona que ellos esperaban, si yo era su "salvadora"...quizás deba hace lo que me corresponde.
All Rights Reserved
Sign up to add Magos de Mina: La Piedra de Nami (Libro #1) to your library and receive updates
or
#268union
Content Guidelines
You may also like
You may also like
Slide 1 of 10
Amigas traicioneras cover
Mafia Roja.   §Chestappen§ cover
Lucifer cover
El Chico Del Hospital  cover
HYBRID | Bella Swan. cover
Mi vida con mi familia aristemo segunda temporada . Terminada  cover
Consorte [Saga Sinergia] cover
Aidan Gallagher | LO DIFÍCIL  DE CONECTAR |(+18) cover
Tú, solo tú cover
Alas de Fuego Leyendas #1: Acechador Oscuro cover

Amigas traicioneras

9 parts Ongoing

Todos conocemos el sentimiento de ser el nuevo en algo, pero en el caso de Luna y Blanca lo han experimentado con mas intensidad y en peores condiciones. El último año de bachillerato han tenido que cambiarse de colegio, y no todo es malo, porque tienen unas amigas maravillosas y unos amores un tanto crueles. Pero ninguna historía termina con un final feliz, por mucho que la gente aparente, solo es eso apariencias. Los finales felices no son una cosa que coincida mucho con estas hermanas. «¡Es que no lo entiendes! ¡Necesito verte muerte para poder descansar tranquila, soñar como te retuerces en las pocas cenizas que hayan sobrado de ti y fingir que lloro en tu funeral! Soñar cada noche con los gritos que hacías mientras te arrancaba la piel poco a poco y te torturaba día y noche-eso fue lo último que pude ver antes de notar el afilado cuchillo dentro de mi estómago.»