Desde tiempos inmemoriales, la ciudad de Aktushiem ha protegido al Libro del Infinito, poseedor de los secretos del Universo. Athor, el feroz líder de los Bersiark, fue asesinado misteriosamente en las puertas de la ciudad cuando intentaba conquistarla. Y su ejército tomó la vida de la emperatriz en compensación. Dice la leyenda, que el espíritu del general maldijo a sus guerreros, transformándolos en fantasmales demonios incapaces de hallar descanso hasta tanto se apoderasen del Libro del Infinito y restituyesen su poder... Al mismo tiempo, el alma de la emperatriz conformó un escudo mágico que protegió a su ciudad... Hacía veintiún años desde ese entonces. Y, tanto en el campamento de Bersiark como en Aktushiem, se aguarda el desenlace. El fin de una batalla que todavía no ha comenzado...