La búsqueda de la identidad a través del tiempo puede ser una tarea propia de titanes. Cada personaje de esta novela es un titán. A su manera cada uno de ellos ha logrado sobrevivir, otros morir, en una Argentina donde la identidad es moneda de cambio. Ambientada en la época del proceso militar, la historia no se sirve de ese contexto para generar golpes bajos ni para caer en lugares comunes ni cliches, sino para contarnos cómo la pérdida de la pertenencia pone en riesgo nuestra forma de sentir. Es una novela distinta.