Entre mafias.

La vida no es fácil, y eso, Adara lo tenía muy claro. Aún era una niña cuando su padre la abandonó y tan solo un par de años después su madre fue llevada a prisión, quedando atrapada en el sistema y con el recordatorio constante de proteger a su hermana menor; todo eso y tan solo había llegado a los once años.

Crecer y encontrar su espacio en el mundo que le había empezado a sonreír la formó en una jóven mujer madura, fuerte y capaz. Pero, una parte de ella siempre se sintió atraída por lo prohibido y eso mismo la llevó a conocer a Aleksey, la encarnación del peligro; un huracán que arrastraba todo a su paso sin el mínimo de remordimiento, o eso es lo que solían decir.