(Dibujé un Fanart y lo puse de portada! YAY!)
Decidí escribir una historia en un idioma en el cual me sintiera cómoda, así que nada mejor que mi idioma natal!!! :D Creo que lo voy a traducir al inglés... algún día.
...
Kagome se encuentra sola, en una aventura que nadie se esperaba, la cual está siendo pensada por una vieja bruja. Ella planeó todo 50 años atrás. Ella recibió visiones, y en ellas vio la destrucción de la Perla, su obsesión.
Pero... como de costumbre, Inuyasha clava el dedo en la llaga, y hace que Kagome no quiera volver a hablarle. Con el corazón destrozado, la sacerdotisa decide alejarse, y se encuentra con el que menos se espera.
Sesshomaru, el medio hermano de Inuyasha, se convierte en su aliado, y junto con él y Jaken, vivirán unas cuantas cosas que los cambiarán de por vida... El orgulloso youkai se siente atraído hacia esa "humana", pero no lo quiere admitir; él detesta esos "sentimientos humanos", y se dice a sí mismo que sólo tiene curiosidad, pero... ¿Será verdad? ¿Qué pasaría si en vez de ocultar todo, escucha a su corazón?
(...) "Es sorprendente cómo unas simples palabras pueden cambiar tu forma de pensar hacia alguien, ¿No es así, Sesshomaru?", preguntó la joven, mientras miraba hacia el cielo nocturno.
El youkai no supo qué responder. Si decía algo incorrecto, supo que iba a lograr que la sacerdotisa se enojara, pero si le decía lo que pensaba, le iba a dar falsas esperanzas.
"Sesshomaru, ¿estás escuchando, o no?", preguntó la sacerdotisa, algo molesta.
Miró hacia un costado, y vio que el youkai dormía plácidamente, o al menos eso parecía. Kagome recostó su cabeza en sus hombros, apoyó cómodamente su espalda en el tronco del árbol, y se quedó dormida.
Sesshomaru abrió los ojos, y la vio allí, totalmente tranquila, y sonrió de lado. 'Más le vale dormir, porque no tiene ni idea de lo que se le avecina mañana.' , pensó. Luego, cerró los ojos y se durmió. (...)
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero