Se ha acabado. Simplemente se ha acabado. Uno nunca aprecia al tiempo realmente, siempre lo culpan de todo, nadie lo ve como lo que es, un regalo precioso, algo valioso que no se compra, mucho menos se vende, se puede vivir una vida entera en un segundo, en un suspiro, en una caricia y en una mirada puedes recorrer la eternidad y volver. Me gustaría decir que a mi me quedará más tiempo, me gustaría decir que la vida no se ha burlado de mi cientos de veces, pero no es la verdad. La verdad es que se ha acabado, mis suspiros estan contados, y te lo voy a contar todo, te voy a decir la verdad sobre mi, la verdad sobre mi enfermedad y la única verdad sobre ti, mi querido Alex, no me queda mucho tiempo, cada bombeo de sangre va más lento, como si lo que corre por mis venas no fuese sangre, sino espeso aceite. Y como se que no vendrás a verme en mi lecho de muerte, te voy a escribir, hasta que la máquina que anuncia mi límite entre la vida y la muerte suelte un desgarrador ¡Piiiiiiip!
"Siempre habrán ángeles en el infierno y tentaciones en el paraíso."
Polos opuestos, llamados por el destino.
Zehra una mujer con cara angelical, aura de diosa, cuerpo de infarto que irradia elegancia y clase por donde quiera que vaya.
La vida de Zehra no era para nada diferente a las demás, no hasta que lo conoció a él. A un hombre sombrío, sin escrúpulos, arrogante, y narcisista. Su vida dio un giro de 360 grados, cuando después de una larga y temerosa noche se despertó en un lugar completamente desconocido para ella.
Entonces la acción inició. Su vida ya no era aburrida, porque el peligro, los problemas, y los deseos explícitos yacían parte de ella. Aquel hombre la sedujo, el se hizo adicto a ella, la hizo su sumisa, su mujer, y la reina de su gran imperio.