Viktor Nikiforov era el heredero al trono en el país cuyo nombre no interesa en estos momentos. Un día sus súbditos deciden hacer una revolución por la forma corrupta en la que los padres de éste gobernaban el país, aunque Viktor fuera inocente ante este "crimen" él terminó pagando las consecuencias. Estando a un paso de morir la cosa mítica sucede. Un demonio lo había salvado.
--"¿Quién... eres?" --el peliblanco miró aquella figura que sólo lo miraba con una expresión de satisfacción.--Esas alas... ¿un ángel?"
--"¿Ángel? ¿bromeas? no me compares con esas sabandijas que son peores que el mismo diablo --se acercó a él.--Y tú, jovencito, me servirás como los ángeles a Dios, como los demonios a Lucifer... desde ahora... hasta el fin de los tiempos"Todos los derechos reservados