Con la muerte no se juega, es como jugar con fuego, igual de doloroso y peligroso. Grace sabe que su regreso de California no será fácil. Tendrá que volver a adaptarse a su antigua vida y remontar. Abraham se topa con ella, pero un error de él hará que Grace salga de su vida, haciéndole sufrir de la manera mas dolorosa posible. - No te vayas, te necesito.- cerré los ojos y liberé aquellas lagrimas que tanto dolían.