Esta es la historia de -, una muchacha dedicada al arte y todo lo que tenga que ver con plasmar lo abstracto en un lienzo o donde pueda y quiera (incluyendo su inestabilidad) , con solo unas cuantas brochas y muchos oleos que quepan en la palma de sus manos. Un día recibe la visita de una persona inesperada. Según algunos comentario que dicen haberla visto por ultima vez: Esta caminaba junto a una mujer ya anciana, otros dicen que la vieron con un hombre, cosa que no era raro ya que cada semana salia con uno nuevo, pero algún que otro afirma o asegura haberla visto hablar sola e interactuar con un ser "invisible". Pero lo más preocupante en esta historia es que su paradero es desconocido, no hay rastro de una Celeste Zumarán, nada más que solo pinceles usados y restos de pintura frescos sobre sus lienzos.