Nora, una huérfana con una pierna torcida, vive en un mundo donde los "débiles" son dejados de lado. Desde el momento en que muere su madre, teme por su futuro hasta que es perdonada por el poderoso Consejo de Guardianes. La razón es que Nora tiene un don: sus dedos poseen la habilidad de bordar de manera extraordinaria. Supera con creces a la habilidad que mostraba su madre, por lo que se le encomienda una tarea que ningún otro miembro de la comunidad puede desarrollar. Mientras su talento la mantiene viva y le supone ciertos privilegios, se da cuenta de que está rodeada de misterios y secretos. Nadie debe saber de su intención de descubrir la verdad sobre su mundo, además de averiguar qué existe más allá de sus límites.