""No te preocupes", "Nada pasará" o "Están a salvo con nosotros"; cuantas mentiras, Los Primeros cometieron el error de confiar en los humanos, pero nosotros no, ¿Entendido? No confíes en nadie, ni en tu propia sombra, escapa cuando tengas oportunidad, no pienses en mi bienestar, solo corre" eso era lo que le había dicho esa adulta que tanto apreciaba, y así hizo, corrió, aunque no contaría con que un guardia de su amo lo estaría esperando en la salida para impedir su escape. Al enterarse de su intento de fugarse, su amo enfurecido, mató a su cómplice frente a sus ojos, para luego molerlo a golpes -y no lo digo de manera figurada-. Fue algo difícil de ver para un niño de solo seis años, pero gracias a eso, se volvió sumiso y obediente.
Un año después su amo falleció, volviendo al mercado y siendo vendido nuevamente por una pareja, luego de un pleito fue regalado a su hijo mayor, quien no vivía con ellos, nueve años mayor que él.