Vivir con tu padrastro alcohólico, drogadicto y abusivo no es algo que le desearía ni a mi peor enemigo, tengo 18 años y vivo esa triste realidad junto con mi madre y mi pequeña hermana de 2 años. Mi madre tiene que trabajar de mesera en un restaurante de Bahía Vizcaína 10 horas diarias para poder sacarnos adelante a mi hermana y a mí mientras yo me encargo de ella y del colegio.
52 parts