"Me muero por tus huesos, Cassandra. Y estoy convencido de que así será hasta que me muera, hasta que ya no tenga dientes, cuando mi cabeza brille por la ausencia de cabello, y posiblemente tenga incontinencia, incluso si mi memoria falla y se pierden todos mis recuerdos, tú seguirás estando ahí, en el centro de todo, de mí todo, sin importar nada, porque el corazón no olvida, mi cuerpo podrá fallar, pero mis dedos recordarán tu tacto, mi corazón siempre te pertenecera..."