-Entonces...todo fue mentira...-Emma veía hacia la nada, en shock, sin poder creer lo que acababa de escuchar, se sentía devastada, traicionada, sucia, sin embargo su cara solo reflejaba seriedad. Shawn la veía sin saber qué hacer, desesperado por explicar, de inmediato actuó, tomó su mano, pero Emma la quito lentamente, Emma seguía perdida en un mar sin fin de emociones, confundida y sin saber qué hacer.
-Emma, por favor, déjame explicarte, todo esto es un error, no es lo...-Shawn empezó a hablar demasiado rápido tal como lo hacía cuando se ponía nervioso, empezó a sudar frío y le temblaban las manos, sin mencionar el dolor de estómago que la situación le había provocado, pero paro en seco, cuando la mirada echa trizas de Emma empezó a levantarse, sus ojos estaba rojos inyectados en lágrimas, las manos le temblaban y respiraba enérgicamente, tratado de calmarse para no dejar verse llorar.
-Tienes razón...-Empezó a asentir cuando una lágrima se desprendió de su lagrimal izquierdo rodando por su mejilla.- ¡esto fue un maldito error!.- Gritó lo más fuerte que pudo, poniendo su pálida piel roja, y todo su cuello tensado, Shawn empezó a negar con la cabeza desesperado, acercándose a la vez.- ¡Jamás debí de volver a confiar en ti!.- Su pecho empezó a subir y a bajar fuertemente al compás de sus lágrimas, ya este grado no podía respirar bien, y tenía miedo de hacer asta el más mínimo movimiento. Shawn la volvió a tomar se la mano, pero ella la el jo bruscamente.- ¡Dime Shawn! ¿¡Por cuánto cóbrate mi felicidad!? ¡¿Cuánto dinero te dio mi mama, para convencerte de que hicieras esto?!.-Volvió a gritar lo más fuerte que pudo dejando su garganta completamente irritada, de sus ojos no dejaban de emanar lágrimas y de su boca sollozos, Shawn no sabia que decirle, eso o simplemente no podía por el gran nudo que tenía atorado en la garganta.- ¡Dime!.-Volvió a pedir a gritos.