Otra de mis miles de historias inacabadas que algún día, porque tiene que llegar sí o sí, la acabaré.
Es un fan-fic que escribí en mi etapa de la vena gorda cuando mi bff me picó a leer fan-fics de Harry Potter en un forasio. Trata de las aventuras locas de una chica que siempre se ha sentido como una muñeca, después de haber conocido en profundidad a Draco. Basado desde el quinto libro de Harry Potter.
Sinopsis:
Hace varios años que el ministerio se comportó como no debía, como si ignorasen lo que ocurre, cerca de ellos. Fudge y Umbridge hicieron de este un lugar lleno de mentiras, de los cuales muy pocos sabían la verdad. No querían admitir que estaban en peligro, que Voldemort -no me da miedo pronunciar su nombre- había vuelto.
Todo acabó bien para unos, mal para otros, y de una forma terrible, para el resto.
Fue en mi quinto curso en Hogwarts cuando me enteré de por qué Voldermort se obsesionó con asesinar a un bebé Harry, y cuando Hogwarts no fue lo mismo que antes. Pero, ¿cómo va a ser igual que antes? Nunca lo fue, y eso lo sabemos todos. A lo que me refiero, es a que ese año hubo un fuerte contraste con respecto a otros.
Y, al mismo tiempo que Hogwarts cambiaba, decidí hacer lo mismo, pero tardé en darme cuenta de que, aunque hubiese cambiado, había algo que no lo había hecho.
Tom Riddle logró salir del diario en el momento que le hacía creer a Harry Potter que lo había derrotado, aunque la realidad fue que Tom aprovechó para escapar y volver a tomar lo que perdió hace unos años.