Una noche sin café,sin ese maravilloso café con extra espuma y sin esas tostadas con mermelada de mora que solía ir a comer con ella,sin esas largas conversaciones que teníamos,sin nuestras risas retumbando fuertemente en el restaurante a causa de cada tontería que decíamos y del gran silencio proveniente de los demás clientes,sin escuchar su voz tarareando cualquier canción que la rockola reproduciera,sin el rosado de sus mejillas,sin su mirada,sin ese café de sus ojos que tanto me encanta y sin verla rodar la vista mientras me llamaba tonto por algún comentario fuera de lugar que yo hiciera. Aún recuerdo la noche que bailamos Jailhouse Rock de Elvis Presley y como mis torpes pies intentaban seguirle el paso...Quien diría que esa sería la última vez que vería esa hermosa sonrisa,que la vería a ella; pero no me detendré,no hasta encontrarla y saber porque se alejó.
3 parts