Camila tiene 16 años y asiste a un colegio privado llamado "Santa Luisa", donde todas sus amigas la admiran debido a su carisma y optimismo, y muchos chicos sueñan con ella. Sus padres están casados hace 17 años, y se siguen amando. Su padre, Esteban, es policía y su madre, que se llama Malena, trabaja en una gran empresa donde es administrativa. Camila, a pesar de sus típicos problemas de adolescente, como el acné, el colegio la menstruación y muuuuchos más, se puede, más bien se debe decir que es feliz. Pero en poco tiempo, a causa de una tragedia, esa vida tan tranquila y plena que llevaba se derrumbará y caerá sobre ella. Transformándola en una persona triste, débil, antisocial, pesimista, huraña e incluso, suicida.