Casi pasados dos años de su transformación y de la muerte de su hermano Derek, Caroline Richards continúa su vida con el que ahora es su novio y único apoyo, Jonathan Morgenstern, todavía atormentada por el pasado, siendo los únicos Cazadores de Sombras que existen. O eso creían. Tras descubrir que las historias habían sido ciertas desde hace cientos de años, Caroline y Jonathan tienen que hacerse un hueco en la Clave y conociendo a los verdaderos nefilim a la vez que hacen frente a un nuevo y poderoso nuevo enemigo, así como a secretos más oscuros de las más antiguas familias de Cazadores de Sombras... Y de Caroline.