Soy Amber Tvedt.
Chica promedio, nada extraordinario que contar sobre mi, intente muchas cosas para descubrir algo que sea un talento, pero no parece que tenga ninguno.
Lo único que destaca de mi casi invisible existencia son mis ojos, que cambian ligeramente entre las tonalidades grises y azules dependiendo mi humor, nada extraordinario. Tengo 17 años, cabello castaño y altura promedio.
Como sea, la pesadilla esta a punto de comenzar ya que mi padre un hombre con dinero, quiso cambiarme de instituto cuando decidió prestarme atención y ayudarme, pero no encajo un pelo.
Me mude porque mi madre es una mujer que fue muy exitosa pero acabo su fama con problemas de apuestas, lo bueno es que pase de no tener dinero a ser asquerosamente rica , solo me tomo 5 años de suplicas y una charla con recursos humanos conseguir la ligera atención de mi padre.
Lo triste sobre mi es que el mayor de mis problemas es el mas tonto de todos, la poca capacidad que tengo para socializar, eso es lo que mas me preocupa de mi, de una forma u otra siempre logro hacer un comentario que me hace quedar mal o soy inepta para entender las señales de la gente que me rodea.
El resto de mi vida es muy tipico..