El demonio cayó aún costado de ella, y el cuerpo inerte de otro cayó pero este había muerto no por una flecha había muerto por la espada de su compañero. Otros dos demonios cayeron y fueron por una espada y el ataque de un pequeño zorro. Su viaje casi estaba concluido, ella saco la famosa perla de Shikon y se adentro en el pequeño templo a cumplir con su labor. ❄Reescrito