Este era un mundo aparentemente diferente al que conocemos. Un amplio número de especies míticas existían ahí, sin embargo, había algo en común con el mundo humano; la crueldad de algunos que destruía a otros.
Donde la magia abundaba en cualquier criatura viviente, la ley fue creada a conveniencia de los más poderosos seres. Demonios, brujos, dragones entre otras almas oscuras, fundaron reinos sobre tierras puras que ellos corrompieron vilmente, tomando sus propiedades mágicas con brutalidad, forzando a los habitantes "débiles" a perder la vida luchando o huir lejos dejando todo para sobrevivir.
Los seres de luz poseían una magia que solo usaban para su protección, sin buscar el daño hacia otros, libres de odios, rencores o venganzas. A pesar de vivir recluidos, incluso siendo cazados de forma cruel, no dejaron que el miedo y el rencor dominara sobre la bondad de sus corazones.
Una lucha constante donde pocas veces había un final feliz para ambos lados.
Cuando sus miradas se cruzaron por primera vez ninguno lo admitió. Al Rey un escalofrío le recorrió y el corazón del príncipe se acelero, eso solo la luna lo sabía, siendo su madre obviamente los conocía.
Les dio su brillo sin dudar y cada noche espera poder ver como esa historia avanza con su bendición hasta el final.
-Para todos aquellos lectores que quieren iniciar un bello cuento sin final. Les presento "lazos" un chicle que recuerda los tragos dulces de los encuentros inesperados, el intereses continuo y un amor que nace como un clavel blanco.-
Rian Tegui
*Actualizaciones todos los sabados a las 7pm horario de New York*