Y de todas las miradas que me diste ninguna me decía que me amabas, entonces entendí que jamas podría tenerte, sé que todas las despedidas son tristes pero por que siento que soy la única que esta sufriendo. Ahora te miro por detrás y lloro... Así que te digo que te amo aunque no me puedas oír. Eres la persona que anhelo tanto, pero aun así no me creíste en mi. Solo deseo que seas feliz. Atte: Una Nishikino enamorada.