Él: Te quiero. Ella: Si si, quiéreme como quieras y donde tu quieras pero lejos. Él: Eres fría, malvada... No te reconozco Ella: Eres un cabrón. Y te odio. Y sí, lo acepto. Soy esa hija de puta que rompe corazones por diversión. Que se ríe de personas que son capaces de cruzar el pajar para traerme la puta aguja. Y claro cabrón, yo no sabía de poesía. Que tú trataste de enseñarme pero tus sentimientos resultaron ser mas falsos que los mios. Gracias a tí tengo el corazón con bozal. Bien amarrado, para salir ilesa de esto. Ninguna bestia como tú cortará el bozal, alimentará y adiestrará mi amor. Nunca jamás besaré la mano que antes me pegó. No me harás daño al largarte y dejarme. Mis labios no se harán desierto sin tus besos. Ni me inundaré al cuello de amor. No me hará falta llorar por ti. Porque ni siquiera de ti me enamoraré. Él: Te reconquistaré. Lo juro. ¿Conseguirá Edward recuperar algún día el amor que él mismo mató en Bárbara o ella mantendrá su promesa y nunca volverá a sentir algo por él?All Rights Reserved
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