"Pegas fuerte, mujer. Y cuando te enojas, luces tan adorable. Parece que te sale humo por las orejas, tus mejillas blancas se encienden como un foco de navidad multicolor (así ya nos vamos poniendo a tono), tu frente se arruga y un montón de surcos sin dirección salen disparados a todas direcciones. Hasta tus cejas claras, cobran vida propia..."