Lidia, cansada de seguir a rajatabla las normas, rompe las más especiales, que impedían comer un trozo de pastel en el colegio y contradecir a una profesora. La chica de cabello chocolate huye desamparada hacia el bosque, al que siempre habían ido en excursiones escolares, pero esta vez había cambiado mucho, no eran tan aburrido como de costumbre...All Rights Reserved