Después de tres años de haberme ido de Boston pasé de página y comencé desde cero. Conforme pasaba el tiempo me fui olvidando de muchas cosas pero no deje de comunicarme con mis seres queridos. Después de unos meses aceptando la ayuda de Kyle terminé dándome cuenta de que aún me gustaba así que un día me propuso ser su novia y acepté con gusto. Todo seguía normal y Kyle me pidió matrimonio, obviamente le dije que sí. Ya había pasado el tiempo, el día de la boda se acercaba cada vez más. A dos meses de la celebración el trabajo aumentó repentinamente pero eso no fue lo peor. Me reencontré con ellos. Ya no sabía qué hacer, sólo había una pregunta que rondaba por mi mente... ¿Black or White?