" Con tan solo quince años, Park Jimin es heredero de una fortuna más exuberante que la del mismísimo sultán de Brunéi.
Un niño rico, acostumbrado a los lujos más extravagantes desde su nacimiento, su riqueza crecía conforme este respiraba.
No había nada que estuviese fuera de su alcance, Tarjetas de crédito ilimitadas, las ropas más caras con las que se pudiese soñar, mansiones para vacacionar en cada país del mundo. Todo esto dado por sus padres, para recompensar el tiempo y atención que no le brindaban.
Joder, había veces que hasta olvidaban su cumpleaños y tampoco los veía por mes cuando dejó de creer que realmente le importaba alguien.
Cuando comenzó la secundaria, se volvió un chico con un carácter de mierda; frío y controlador como ningún otro. Humillaba a cualquier persona que el no considerara a su nivel. Solo se juntaba con personas de su misma círculo social o como el gustaba de llamarlos, sus " futuros empleados" pues la mayoría de los padres de estos trabajaban para su padre. Parece que jamás va a cambiar...
Hasta que lo conoce a él".