Christopher un extrovertido empresario, nunca a necesitado algo, pues el dinero que tiene le sobra. Un ligero problema se avecina, si es que quiere seguir trabajando en la empresa editorial de su familia tiene que casarse, ¿Que hará al respecto? Erick un chico que trabaja como un secretario, recomendado por su familia, él no necesita trabajar, pero el no querer vivir del dinero que sus padres generan lo hizo buscar un trabajo. Un día que debería ser normal cambia un poco. - Tienes que casarte conmigo. - ¿Disculpa? - Casate conmigo. El amor lo puedes encontrar, incluso después de creer encontrarlo.