Ella era el tipo de mujer que pensaba como hombre y actuaba como uno. Su único pero atroz defecto era que poseía un corazón muy amplio, ahí había espacio para todos los hombres: desde mujeriegos, tímidos, desconsolados, amargados e incluso machistas. Solo existía un tipo de hombre que se escapaba de las garras del lobo, ese tenía nombre y apellido, Alexander Schell era un romántico empedernido que poseía la firme ilusión de que algún día encontraría el amor verdadero, era un hombre tímido, taciturno y solitario que se refugiaba en su trabajo como editor de novelas de romance juvenil. ¿Creen posible que este hombre logre capturar el corazón vil de esta Casanova?
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