Todo comienza con una niña de 7 años de edad. Ella reía, jugaba, amaba, pero sobretodo, soñaba. En sus sueños habia un joven de su edad. Él era de cabellos azabache y ojos azules oscuros, tanto como la noche. Ella era de cabellos castaños y ojos de un color miel brillante. Él era frió, pero tierno. Ella era amable, pero triste. Ambos dejaron de verse en sus sueños. ¿Qué pasaría si la pequeña de ahora 16 años se encontrase con aquel miaterioso joven? Ella pensó: "Mi sueño se hizo realidad" Pero, no todo salió como ella soñó. "Ahora soñaré por siempre"