Venga ya, no me jodas que no era el destino?
Nos conocimos en una tienda de música
Tu eras música
Yo me estaba comprando una guitarra
Me acordé de tu grupo, te seguí, me hablaste.
Nos conocimos, nos quisimos, y tanto!
Venga ya, y si no hubiera estado allí? Y si hubiera ido antes o después? Nos habríamos conocido?
No es que me arrepienta ni nada.
Pero todo ha sido tan...perfecto? Como un sueño no crees? Demasiado bien iba todo.
Me regalaste una rosa mientras llovía. Me llevabas a cenar. Me dabas casi todo tu tiempo. Me enseñaste tanta música...me enseñaste tanto... ay dios, tu voz, tu todo...
Perdí el miedo gracias a ti.
Pero un día estabas tan...extraño? No me mirabas, no me besabas, ni aún estando triste dejaba de sonreir para ver si lo podía arreglar...
Cortaste. Perdí las ganas de todo.
Como si fueras un salvavidas, me ahogaba sin ti entre el pánico de nadar en el gran mar sola.
Y cuando estaba en lo más hondo, en los más oscuro y triste. Llegaste de nuevo e iluminaste todo.
Me dijiste verdades horribles, pero te las perdone, y ahora estamos así, como sino hubiera pasado nada, disfrutando de lo poco que nos queda...
Para mi eres parte de mi destino, una dolorosa parte.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...