¿Qué pasaría si un día te despiertas y tu cuerpo ya no es tu cuerpo? O al menos no en la forma y complexión a la que estás acostumbrado. Eso solo quiere decir que tienes dos opciones: Uno: Buscas la forma de tratar de comprender que fue lo que sucedió y arreglarlo. O... Dos: Disfrutas un poco de la aventura mientras dure.