Jamás había visto a Michelle con otros ojos que no fueran los de un adolescente hormonal tontamente enamorado. La respetaba, la quería y lo volvía loco. Ella era increíble, su voz, su personalidad...su hermoso rostro. Michelle era delgada, era inteligente y simplemente preciosa. Peter adoraba el olor de su castaño cabello, su tez morena, sus ojos y sus labios. No importaba cuántas veces se besaran, para él seguía sintiéndose como la primera vez, en aquel puente y con Peter regresando de lo que pudo ser una muerta segura... Advertencia: One Shot Inspirado únicamente al Lemon. Disfrútalo.~