Tengo muchos años viviendo, quizás no tantos, quizás si. El punto aquí es, quiero compartirles lo que en mis años de vida he experimentado, lo que he vivido desde mi infancia hasta mi madurez. Mirando a mis niños pensé que quizás era hora de compartir mis historias, como mi abuelo lo hizo conmigo en su momento, pero mis hijos son demasiados pequeños aún. Por esa razón, decido contársela a todos aquellos quienes quieran escucharlas.