Asesinar a alguien no es nada sencillo. Los métodos directos tienen el problema de que uno corre el riesgode acabar en la cárcel con demasiada facilidad. Y cuando se intenta ser sutil, se cometen errores de principiante. ¿Quién no ha intentado cometer un asesinato usando matarratas, sin caer en la cuenta de que esa persona no es una rata (excepto en sentido metafórico) y que por tanto ese veneno no le va afectar en absoluto?Ofrezco un puñado de métodos infalibles que he perfeccionado a lo largo de años de odiar a gente y de maquinar planes perfectos en mi habitación hastaque mi madre me quitaba las libretas y apagaba la luz, que ya es hora de dormir. Espero que os sean útiles.All Rights Reserved