Oswald el conejo afortunado fue obligado a vivir en Universal estudios desde el momento en que fue arrebatado de su creador y padre Walt Disney en 1928, siendo maltratado por la mano de Charles Mintz. Hasta que este fue despedido y Oswald fue a manos de un animador que le dio a un buen amigo. Un Toon que no es del estudio a ido haciendo travesuras y metiéndolos en problemas desde 1930 y ya en los años 2000 Oswald a tenido suficiente de un ratón bromista.