-¿Por qué desperdiciar su talento de inventor ayudando a humanos idiotas con inútiles venganzas? Resulta casi una ofensa, Dr. Slug -¿Y crees que trabajar para ti me sentaría mejor?- el "héroe" con sombrero blanco sonrió con dulzura, y en su voz se notó un tono de diversión. -Será tan maravilloso que desearás haberme encontrado antes. -Yo no te estaba buscando. -Pero yo a ti, sí. -¿Cuál es el truco? -Ninguno. -Suena demasiado bueno para ser verdad. -Lo es, mi querido Dr. Slug... -¿Pero? -Hay un detalle. -Dilo. -A partir de ahora, eres de mi propiedad.All Rights Reserved