Elegida fue para llevar al reino a su salvación y ruina, calzando zapatillas, engalanando vestidos y con máscaras disfrazando su verdad:
Una princesa.
Y oportunamente, no hizo falta poseer sangre legítima para su propósito conquistar.
Podría haber dominado el poder de derribar mil paredes y hacer caer mil palacios; sin embargo, el pajarito nunca rompería las férreas rejas de su jaula ni hallaría aquella anhelada libertad.
Habían fronteras, habían cadenas.
No obstante, tenían grietas todas ellas:
Sus dedos se movían sobre colores para liberar su alma prisionera,
su voz declamaba aquello que su corazón desistía por gritar,
sus manos escribían cartas que jamás se dirigían a ninguna parte... Pero solo siendo ingenua lo creyó.
¿Cómo sería entrar a La Selección con objetivos muy singulares? Y peor aún, ¿terminar con otros muy diferentes?
Una historia relatada desde un punto de vista muy peculiar.
Versión creada con intención de precuela basada en la serie de libros de Kiera Cass, La Selección. Se pide sincero respeto hacia los derechos de autor; todos los derechos en general. Obra registrada en Safe Creative ©2017All Rights Reserved