-Soy guitarrista, es todo lo que soy y lo que seré siempre -. Aquellas palabras dichas hace doce años aún resonaban el la mente de Jean cada mañana. Esas palabras habían roto su alma, viendo como la persona que ella más amaba se alejaba de su lado y como la sacaba de su vida como si ella no fuera nada.
Ahora, doce años después de aquel día, y tras la repentina muerte de su padre, Jean vuelve a casa, vuelve a Nashville, para asistir al entierro de su padre. Aquel lugar se mantiene intacto, como si nada hubiera cambiado, pero el mundo volverá a girar de nuevo cuando vuelva a cruzarse con Taylor.