Divorcio, acto de amor propio.

Podría escribir está historia diciendo que es ficticia, pero muchas veces la realidad supera la ficción.
Si estuve dos años conviviendo con Ricardo y me case, ya que si el deseaba tener hijos le dije que mínimo debíamos estar casados. Personalmente para mí tener hijos nunca fue una opción ya que no me gustan los bebés. A los 5 meses de ese suceso que no fue agradable más bien estresante y poco romántico no hubo luna de miel.
Lo mejor que podría haber hecho, habría sido no casarme, pero el error ya estaba hecho, entonces me divorcie.
Durante el proceso de antes se casarme que estaba muy triste y confundida, llevando una mochila pesada, con quién no hablaba con nadie no tenía amigas y mi familia no la quería preocupar, nunca supieron lo que me pasaba. Pero como mujer sola e independiente que vivía en otro país lo supe hacer a mi manera y me divorcie de una persona que no me amaba.