Alexia Lynn nunca se había limitado a tener los pensamientos que una adolescente común de diecisiete años debería tener.
Ella prefería dejarle las fiestas, chicos y el alcohol a el resto de chicas de su edad.
Su mente solía viajar hasta criaturas místicas, mitos, teorías, películas, series de misterio y crímenes y solía inventar un montón de historias en su mente que permanecían sin un cierre.
Quería marcar una diferencia, hacer un hallazgo, demostrar que hay algo que estamos ignorando, quería descubrir algo.
Algo grande.
Hailey Alexia Lynn quería ser la responsable de que dos mundos se unieran.