Nunca le hacemos caso a los pequeños detalles que nos rodean. Si tan solo nos detuvieramos un segundo, notariamos que las apariencias engañan. Y mucho más en el mundo de la alta costura. ¿Quién diría que un estudiante extranjero, tendría tanto parecido a una joven hermosa? Tal vez sea por sus finos rasgos, en conjunto con su suave y clara piel, podría ser su altura que llegaba a ser la de una modelo estándar, otro punto podría ser lo ajustado que le suelen quedar los pantalones. O bien por qué uno de sus pasatiempos es modelar como mujer para grandes marcas de ropa.