Desde cuarto año, Hermione y Snape permiten que los sentimientos fluyan entre ellos y comienzan una relación a escondidas de todos.
Sin embargo, debido a que Voldemort regresa con más fuerza y furia, saben que se avecina una segunda guerra.
El trío dorado tendrá que irse pronto en busca de Horrocruxes, por petición de Dumbledore.
Pero Hermione, durante la misión, se da cuenta de que están a punto de ser descubiertos y se vé obligada a borrar de la mente de Snape todos los recuerdos que comparten, desde que se vieron por primera vez. Dejando a un Snape completamente desorientado y con la constante duda de quién es la mujer con la melena castaña que tanto lo atrae.
Y para un mago tan sabio como Dumbledore no pudo haber pasado por alto aquella pasión que desbordaban discretamente sus dos soldados favoritos. Así qué decidió incluir a Hermione en su plan junto con Severus y ella se convirtió en la segunda protectora de Harry, cuyo cargo, la obligó aún más a borrarse de la mente de su amado.
Pero al final, el amor es la magia más poderosa y hermosa que existe en el mundo de la magia ... y en el mundo de los muggles.