Delivery Boy

Cabello largo y negro, larguirucho, cuatro ojos e increíblemente torpe así era yo Adam, no les mentiré era un jodido desastre. Lector empedernido algunas veces escritor de pacotilla con ciertos momentos de gloria, hasta el momento mi vida era una serie de momentos totalmente pubertos en donde en la escala de jerarquía yo era el último y más débil peldaño, era considerado una paria, un error de aquel perfecto sistema que ha creado la secundaria que consistía en tomar la sangre de los débiles para abastecer a los poderosos, atletas y futuras estrellas de cine. Bueno tal vez este exagerando. Si tenía amigos Lily y Freddy juntos luchábamos contra todos los snobs de la secundaria. No tampoco era así, éramos simples extras, la plebe. Hasta que algo cambio y me convertí en el más solicitado por todas las damiselas enamoradas y galanes con complejo de narcisso.

NO COPIAR