Llorar es una locura

Rebeca perdió a sus padres a los diecinueve años en un accidente de tránsito, dejándolas a ella y a su hermana, desamparadas y totalmente en bancarrota.
Durante dos años Rebeca debe cuidar de sí misma y de su hermana cuyo esposo la ha abandonado con sus gemelos de dos años, Rebeca trabaja dos turnos en un restaurant reconocido de la ciudad para poder sobrevivir.
Agobiada por su situación económica y estudiando una profesión que ella no eligió, pero que debe terminar para no perder su fideicomiso en el cual está la cláusula que la obliga a graduarse.
La situación se agrava cuando está a punto de perder el semestre y decide llegar a un acuerdo con su profesor.
Su profesor Zhou Mi es todo lo contrario a ella disciplinado, organizado, millonario, pero oculta algo oscuro de su pasado, su relación con la joven lo ayuda a descubrir quién es verdaderamente, y como vivir la vida sin ser víctima de las circunstancias.