~PRIMER LUGAR del quinto Desafío Utópico~
Había sido su compañera durante cinco años; llevaba cinco años respirándole en la nuca. Desde entonces, todo se había sumido en oscuridad y él lo había aceptado, alejándose y encerrándose en su pequeño cuarto.
No podía tolerar el ruido de las máquinas, o la visión de la decadencia. Otro día para festejar, como siempre, el gran avance biotecnológico había llegado; sin embargo, pensaba afrontarlo de manera distinta.
Cuando se fue a dormir, sin cubrirse los ojos, tenía un único pensamiento en mente: dejaría de temer.