"Dicen que un hilo rojo invisible conecta aquellos que están destinados a encontrarse a pesar del tiempo, el lugar, a pesar de las circunstancias; el hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca romperse". Magnus y Alec fueron separados cuando niños, a pesar de que se amaban. Sí, eran unos niños pero se amaban. Eran unos niños pero sabían que querían estar juntos por siempre y para siempre. Sus padres hicieron de todo para separarlos, pero el destino tenía otros planes para ellos, demostrando así qué hay amores qué son imposibles de separar.