Donde YoonGi es un abogado ajetreado pero decide darse cinco minutos a tomar un café.
O donde JiMin trabaja en la cafetería "Shuvils" y le toca atender a un hombre de piel pálida con sonrisa coqueta.
"Todo fue tan espontáneo, tan natural, que ha ninguno de los dos nos pareció raro que, de pronto, mi mano estuviera en su mano y que nos miraramos a los ojos como dos tontos."
_Mario Benedetti