-Darás amor a la preciosa gema del Nilo, con valentía y belleza traerás orgullo al reino, en recompensa se te será regalada la pureza del cielo, correspondido tendrás la eternidad en tu mano, pero desdichado serás de perderla, ¡Desgracia eterna! prematura muerte apagara tu vela, el olvido será tu condena, el amor en otros ojos no volverás a ver, pues siempre estarás destinado a perder, sin embargo, ¡oíd bien mi reclamo! pues mi mal será finito, si mi condición es escuchada y mi palabra acatada, mi elegido de vuestra voluntad será amo en madre de Egipto me convertirá. solo así mi maldición se romperá, de lo contrario por siempre perdurará.-